El tercer sábado de septiembre se celebra el Día Mundial del Donante de Médula Ósea y Sangre de Cordón Umbilical, una fecha impulsada por el Registro Mundial de Donantes de Médula Ósea (BMDW).
Este registro internacional aglutina los datos de todos los donantes de médula ósea y sangre de cordón umbilical que existen en el mundo.
Objetivos de esta celebración
El objetivo de esta fecha es agradecer a todos los donantes del mundo su solidaridad, ya sean familiares, donantes no emparentados, donantes de cordón umbilical, donantes que ya han realizado su donación y donantes inscritos que lo serán en el futuro.
También se trata de sensibilizar a la población mundial sobre la importancia de la donación de células madre.
Esta celebración continua la labor del Día Europeo del Donante de Médula Ósea, una efeméride impulsada en 2013 por la Alianza de Trasplantes del Sur, constituida por España, Francia e Italia, que se celebra el 27 de septiembre.
En la actualidad, más de 28 millones de personas en todo el mundo son ya donantes de médula, cifra a la que se añaden los más de 650.000 cordones de Sangre de Cordón Umbilical (SCU) almacenados en el mundo.
Requisitos para ser donante de médula ósea
Para poder ser donante de médula ósea debes cumplir ciertos requisitos, entre ellos:
- Tener entre 18 y 55 años.
- Estar sano, es decir, no padecer ninguna enfermedad susceptible de ser trasmitida al receptor o que pueda poner en peligro la vida del donante, por el hecho de donar.
- No se puede donar médula para un paciente concreto, sino para cualquier persona compatible que lo necesite, con independencia de donde resida. La donación es a nivel internacional.
- Ser donante de médula significa adquirir un compromiso para toda la vida.
Enfermedades que pueden necesitar un trasplante de médula ósea
El trasplante de médula ósea es un tratamiento que se utiliza principalmente en el tratamiento de enfermedades hematológicas y del sistema inmunológico. Algunas de las enfermedades que pueden requerir un trasplante de médula ósea incluyen:
- Leucemia: Tanto la leucemia mieloide aguda como la leucemia linfoblástica aguda son tipos de cáncer de la sangre que pueden requerir un trasplante de médula ósea cuando otros tratamientos no son efectivos.
- Linfoma: El linfoma de Hodgkin y el linfoma no Hodgkin son tipos de cánceres que afectan al sistema linfático y, en algunos casos, se trata con trasplante de médula ósea.
- Mieloma múltiple: Esta es una forma de cáncer de células plasmáticas que afecta la médula ósea y puede tratarse con un trasplante de células madre hematopoyéticas (médula ósea).
- Anemias graves: Algunos tipos graves de anemia, como la anemia aplásica, pueden requerir un trasplante de médula ósea cuando otras terapias no son efectivas para estimular la producción de células sanguíneas normales.
- Enfermedades genéticas: Trastornos genéticos que afectan la médula ósea, como la anemia de Fanconi, la talasemia y la enfermedad de células falciformes, a veces pueden tratarse con trasplante de médula ósea.
- Trastornos autoinmunitarios graves: En algunos casos, cuando los tratamientos convencionales no funcionan para controlar trastornos autoinmunitarios graves, como la esclerosis múltiple o el lupus eritematoso sistémico, se puede considerar un trasplante de médula ósea.
Es importante destacar que no todos los pacientes con estas enfermedades necesitarán un trasplante de médula ósea. La decisión de realizar un trasplante se basa en la gravedad de la enfermedad, la respuesta a otros tratamientos y la disponibilidad de un donante compatible.
Además, el trasplante de médula ósea conlleva riesgos significativos y complicaciones, por lo que se realiza después de una cuidadosa evaluación médica y consideración de los beneficios y riesgos.
Periodista: Enrique Raúl Vivas Pino
CNP: 15.730