Alex Cabrera acompañó a su hijo Ramón, receptor de Navegantes del Magallanes, en la práctica previa al juego del miércoles contra Leones, en el Estadio Monumental de Caracas “Simón Bolívar”. Momento que aprovechó para ver muy de cerca a Renato Núñez.

En realidad, Cabrera observa desde hace algunos días a Núñez incluso a la distancia, mientras el slugger del Buque persigue quebrar la marca de 21 jonrones en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional impuesta por el Samurái en la temporada 2013-2014, con Tiburones de La Guaira.

“Los récords se hicieron para romperlos. El de Baudilio (Díaz) duró muchos años, pero Dios me dio la oportunidad, y lo quebré”, recordó Cabrera a Katherine Rosales para la antesala de ByM Sport. “Ahora Renato está trabajando duro esta temporada, es impresionante lo que está haciendo. Quiero que lo quiebre, porque lo más bonito es que algo así suceda mientras uno está en vida”.

Cabrera superó la marca de 20 vuelacercas establecida por Díaz, 23 años después del fallecimiento de la leyenda de Leones del Caracas (1990) y luego de 34 zafras desde que fijara el tope de cuadrangulares (en la 1979-1980).

Núñez, por su parte, amaneció el jueves con 16 estacazos de vuelta entera, la tercera mayor cantidad en la historia del circuito hasta antes del 30 de noviembre, detrás de los 17 tanto de Yurendel DeCaster con Caribes de Anzoátegui en la 2005-2006 como, precisamente, de Cabrera en aquella 2013-2014, de acuerdo con los registros del periodista e investigador Tony Flores.

Cabrera quebró la marca de jonrones fijada por Baudilio Díaz con un Grand Slam

LA RADIOGRAFÍA

Alex Cabrera, segundo jugador con más bambinazos en los anales de la LVBP (135) y apenas uno de cuatro que han superado los 100, ofreció una visión instructiva de lo que ha sido el rendimiento en el cajón de bateo de Núñez, quien hasta el momento registra sus 16 batazos de cuatro esquinas en 128 turnos, lo que representa una frecuencia jonronera inédita cada 8,0 veces al bate, entre los paleadores con al menos 140 VB, según Pelota Binaria.

“Tiene un swing muy compacto y está bateando. Cuando estás teniendo una buena temporada, tiren lo que tiren, le vas a dar a la pelota”, afirmó el oriundo de Caripito. “Tú lo ves turno a turno y no le está haciendo swing a pitcheos malos. Tiene una concentración impresionante”.

El análisis del oriental tiene asidero, porque Núñez ha logrado reducir su tasa de ponches del 24,3 % que mostró en sus anteriores seis zafras en el circuito, al 15,7 % que exhibía hasta antes del primer duelo de una serie de tres con Caribes de Anzoátegui, en Valencia. Un porcentaje de abanicados incluso inferior a la media de la liga (18,0 %).

Cabrera, de 52 años de edad en el presente, quebró la marca cuando contaba 41 calendarios

EL BEISBOL EN EL TIEMPO

Para Alex Cabrera, quien también llegó a compartir la marca de 55 obuses en la Liga Profesional de Japón (NPB, por sus siglas en inglés) con el legendario Sadaharu Oh y Tuffy Rhodes en una refriega, antes de que Wladimir Balentien los superara con 60 en 2013, asegura que el juego de antes, le llenaba más la vista que el actual.

“Para mí el mejor beisbol fue el que yo jugué. Ahorita hay muchos pitchers que lanzan duro, pero sólo eso”, analizó el monaguense. “Antes había lanzadores con más calidad en otro tipo de envíos. Esa es la gran diferencia. Pero es el mismo beisbol, son las mismas cuatro bases y los mismos estadios. La clave es batear, hay que darle a la bola”.

Y según el aún fornido ex pelotero, la esférica también está creando un aspecto diferenciador en el tiempo presente.

“La pelota también está marcando la diferencia. Con la que nosotros jugábamos era de una menor calidad. Esta bola es impresionante”, valoró Alex Cabrera, antes de cerrar con una frase que rememoró a su peculiar estilo cuando era jugador activo. “Yo se lo digo a los muchachos, si estuviese jugando en este momento, daría entre 40 o 50 jonrones por temporada”.

EL DATO

Alex Cabrera es dueño de la segunda mayor frecuencia jonronera entre jugadores que cumplieron con los mínimos legales para optar al título de bateo en una temporada, cuando despachó un vuelacerca cada 10,23 veces al bate en aquella histórica campaña 2013-2014, cuando ganó la Triple Corona. La marca entre bateadores calificados pertenece a Bob Darwin (10,05 VB) en la 1972-1973, con Navegantes del Magallanes. Entretanto, Yasiel Puig registró una tasa de 9,10 VB la zafra anterior con Tiburones, pero sólo en 91 turnos.

Periodista: Enrique Raúl Vivas Pino

CNP: 15.730