Este 19 agosto se celebró el Día del Fotógrafo, un oficio que va de la mano del periodismo para, entre ambos, hurgar en el pasado y presente y dejar constancia de la historia y la vida social contemporánea.
Además, existieron y existen fotógrafos por hobbie, por diversión, para el recuerdo, para hacer homenajes, para documentar fiestas y eventos, así como quienes desde su trabajo le han dado realce a las características artísticas de sus objetivos, que nada y mucho tienen que ver con la función periodística.
A todos ellos, nuestro humilde reconocimiento, ya que sus innumerables clicks nos llevan a un inevitable lugar común: una fotografía habla más que mil palabras. Viva el lenguaje visual.
Desde el viejo daguerrotipo ideado y perfeccionado a partir de 1839 por Louis Daguerre en Francia, hasta la máquina más moderna y sofisticada con la que nos podemos topar hoy día gracias a los adelantos tecnológicos, todos esos equipos fueron y son operados por una mano humana, alguien que con su visión muy particular acciona su obturador para plasmar el detalle, el momento o el suceso según su punto de vista. Y así se difunde. Así se ha hecho la historia. Negarlo no pasaría de una mera necedad. Subjetividad gráfica o criterio comunicacional. Da lo mismo a la hora de evaluar tan determinante y valioso oficio.
Pioneros en Venezuela
Le damos crédito al estudio acerca de la historia de la fotografía en Venezuela, presentado por Aglaia Berlutti en unas líneas tituladas “ABC del fotógrafo curioso: Fotógrafos Venezolanos que deberías conocer”.
Allí se destaca entre los pioneros de la actividad fotográfica en el país a Pal Rosti, Federico Lessmann, Henrique Avril, Ignacio Manrique, Luis Felipe Toro, Alfredo Boulton, Ricardo Razetti, Grazziano Gasparini, Sebastián Garrido, José Sigala, Bárbara Brändly, Paolo Gasparini, Héctor Rondón, Luis Brito, Ricardo Armas, Alexis Pérez Luna, Vladimir Sersa, Nelson Garrido, Thea Segall, Antolín Sánchez.
De ellos se nos antoja realzar al apureño Héctor Rondón, quien se hizo ganador del Premio World Press Photo of the Year en 1962 y el Premio Pulitzer de fotografía periodística del año siguiente por su destacado y valiente trabajo reconocido a nivel mundial como “Ayuda del padre”, fotografía efectuada durante El Porteñazo (dramática imagen que le dió la vuelta al mundo: un cura rescatando a un soldado herido de muerte).
Entre los contemporáneos de dedicación periodística noticiosa, que incluso han servido para apoyar investigaciones policiales destaca la labor de Jesús Castillo y de Álex Delgado. Sus hermanos (nuestros primos) Ramón (+) y Henry Delgado también sobresalieron, pero en el área deportiva, donde después del maestro Vicente Correale y Francisco Mata (+) y sus compadres Larry Azuaje y José NOGUERA, entre otros, tenemos a generaciones intermedias como Marcos Colina, Américo Morillo, Alex Schemberg y Héctor Castillo, entre otros. En aspectos sociales estuvo nuestro tío Juan Quijano (+) y su legado. En la fotografía artística está Félix Gerardi, quien además es un maestro de la fotografía denuncia. También destacan Javier Campos, Vladimir Méndez, Bernardo Suárez y Luis Angulo.
Cuando usted asume que su rol en la vida es estar detrás de una cámara fotográfica adquiere una responsabilidad de orden social, histórica, artística y, por supuesto, periodística.
La captura de cada imagen servirá para corroborar un hecho de la historia, para apoyar actos de diversión, para entretener como hobbie o para comprobar versiones periodísticas, incluso investigaciones policiales.
Son muy diversas las tendencias de este oficio que cada día cobra más importancia en la sociedad moderna plagada de comunicación alternativa.
Desde el fotógrafo de plaza (hoy, una especie en peligro de extinción) hasta el documentalista de la naturaleza o de las ciencias criminalísticas o el recabador de datos gráficos de la historia, tienen sus particulares puntos de vista que hacen de cada exposición una pieza única y con una valoración diferente pero determinante en la construcción del informe final que no es más que el registro de la historia, no necesariamente con carga periodística, pero siempre aporta.
Reportero gráfico
No por último es menos importante. Nos referimos al reportero gráfico en esta gama multifuncional de oficios y objetivos de quien con su click se queda con un instante, un paisaje, un personaje, un hecho, que es noticia y que pasa a ser historia.
Su función, la del reportero gráfico, es sagrada. Es equipo indisoluble del periodismo impreso. Una nota sin gráficas es como un chamo sin padres o viceversa. Ambos se complementan.
El reportero gráfico, en muchas ocasiones no solo se encarga de su obturador y de la perfección de la imagen sino que en ocasiones conduce y orienta al reportero de impreso.
Esa compenetración cada día debe ser más fuerte, sobre todo ante los retos de las nuevas tecnologías, de los fakenews y de los laboratorios de manipulación desinformativa.
Periodista: Enrique Raúl Vivas Pino
CNP: 15.730