Miguel dice no te pasa solo a ti Si te está costando aún más de lo normal cerrar ventas y negocios, puede que estés ignorando lo más importante.

Para lograr ese “sí” de la otra persona hay que saber de persuasión, que es muy diferente a manipulación, tener una buena reputación porque nadie le compra a quien no le inspira confianza y el truco final: pensar en un verdadero discurso ¡no uno típico! sino uno bien argumentado, que responda a una necesidad real y conecte con los botones reptiles. 

Se trata de una serie de palabras que logran activar o desbloquear en el cerebro un interés de compra.

Cuando tenemos claridad de esto, es mucho más sencillo saber por dónde orientar nuestras palabras u objeciones para no perder una venta al minuto de haber comenzado la conversación. 

Te presento algunas: 

Logro – Trascender – Confort – Dominio – Libertad – Seguridad – Reconocimiento – Pertenecer – Control – Explorar – Placer

Vender un carro. 

Según las palabras claves que te mencioné podríamos relacionar la compra de un carro con confort porque brinda comodidad en el día a día y dominio porque te hace sentir imparable, con un estatus. 

Si yo reconozco esto, puedo decirle a ese cliente potencial algo como: 

“Te garantizo que marcará una diferencia en tu día a día porque nada se compara como tener esa independencia para trasladarte de un lugar a otro, con comodidad, sin perder tiempo en transportes públicos ni desaprovechar oportunidades de trabajo por la distancia.”

Y si es un cliente joven, con energía, su primer vehículo, quiere conocer… Podemos identificar que otro botón clave es el del placer porque es una compra que despierta sensaciones de felicidad.

“¿Ya viste lo espacioso? ¿Y el reproductor de música? Imagínate un fin de semana, ir a la playa con los amigos. Una experiencia sin complicaciones.”

¿Por qué podría funcionar? 

Principalmente porque responde a los dolores de la persona, se usan las palabras específicas para hacer clic en su mente. 

Si esto yo le sumo una voz armoniosa, en un tono agradable (ni muy bajo ni gritando), un lenguaje corporal que demuestre entusiasmo, me voy vestido a la ocasión, tengo una sonrisa y de paso, no soy más del montón, sino que uso mis habilidades a mi favor, ¡es muy factible que esa venta sea tuya! 

Piensa ¿cuáles de estas opciones brinda tu producto o servicio?

Periodista: Enrique Raúl Vivas Pino

CNP: 15.730