Hay quienes le temen a las alturas, a las serpientes, otros a los espacios cerrados… pero, existe un miedo aún más COMÚN según la Universidad de Cataluña…

¡Al menos un 75% de la población lo sufre!

Y se trata de la GLOSOFOBIA. 
 

Es decir, el miedo escénico.

¿Es tu caso? Hablar en público con fluidez y confianza es una necesidad, para nadie es un secreto. No necesariamente es tarea para nosotros los speakers. Todos nos estamos constantemente relacionando y exponiendo nuestro trabajo o a nosotros mismos. 
 

Ahora bien, un gran consejo es comenzar a reprogramar tus pensamientos. Es decir, vamos a cambiar ese concepto negativo que tienes y autosabotea. Te propongo un ejercicio fácil: 
 

🔵Escribe el pensamiento negativo específico que te viene a la mente cuando piensas en una presentación. Por ejemplo: “Voy a quedarme en blanco y todos se reirán”

🔵Indica en qué situaciones específicas este pensamiento suele surgir. Por ejemplo: Cada vez que debo exponer mis ideas en las reuniones de equipo. 
 

🔵¿Hay evidencia concreta que respalde este pensamiento? Es decir, ¿ya te ha pasado? o ¿es una exageración?
 

🔵Redacta una afirmación positiva y realista que desafíe el pensamiento negativo. Por ejemplo, si pensabas entonces que “Voy a quedarme en blanco y todos se reirán” podrías cambiarlo por “Estoy preparado y puedo manejar cualquier situación”.
 

Y lo más importante, repite la afirmación positiva en voz alta o por escrito varias veces. Práctica asociar esta afirmación con situaciones que te generan miedo escénico, así poco a poco tu cerebro entenderá que no hay por qué temer de esta experiencia. 
 

Pero, este trabajo también debe venir acompañado de tu preparación. Es decir, necesitas antes de salir a tu puesta en escena, practicar, sentir que tienes las bases de conocimiento para defenderte. Recuerda, que la confianza en tu conocimiento te dará la seguridad necesaria para improvisar con éxito.

La vida está llena de sorpresas, y saber improvisar te permite manejar cualquier situación sin perder el ritmo, creando además un vínculo más auténtico con tu audiencia al mostrar tu capacidad de reacción en tiempo real.

3 consejos claves para improvisar

• Conoce tu target
• Esquematiza tus ideas
• Usa conectores, por ejemplo: cabe destacar, algo más que no podemos dejar de mencionar, sin embargo, en otro orden de ideas…

¡Ah y no olvides acompañarlo de una correcta dicción! De lo contrario, no entenderán tu mensaje.

¡No subestimes esta técnica en tu próximo encuentro y más en estas fechas de reuniones! 

Periodista: Enrique Raúl Vivas Pino

CNP: 15.730